Octubre 2025
Los californianos queremos opciones para impulsar nuestro futuro, no mandatos caros


La comunidad latina es esencial para el futuro de California. Desde las pequeñas empresas a las familias trabajadoras, los latinos impulsamos la economía, la cultura y el progreso del estado. Valoramos la innovación, la sustentabilidad y las oportunidades. Apoyamos la energía limpia, pero no a costa de nuestra economía, las tradiciones culturales o la libertad personal.
Lamentablemente, ese equilibrio se está perdiendo. En vez de dar a los californianos opciones asequibles, los líderes del estado siguen imponiendo mandatos que hacen la vida más cara: desde gasolina más costosa y cuentas de luz más altas, hasta el reemplazo de vehículos, herramientas y aparatos de gas. Estos mandatos ignoran una verdad fundamental: cada familia, cada negocio y cada comunidad sabe qué es lo mejor para ellos.
El Costo de los Mandatos
Un estudio del Instituto de Políticas Públicas de California (PPIC, por sus siglas en inglés) demuestra que aunque los californianos, incluyendo a los latinos, apoyan la energía limpia y las metas climáticas, ese apoyo disminuye cuando las políticas aumentan los costos. Los altos precios de la gasolina y la energía agravan la situación de familias que ya batallan con el alto costo de vida en California.
Propuestas como la prohibición de autos a gasolina para 2035 no sólo son imprácticas, sino que son irreales para las familias que ganan menos de $100,000 al año. Lo mismo aplica para los pequeños negocios que no pueden darse el lujo de reemplazar equipos de un día para otro. En papel, los mandatos energéticos estatales suenan ambiciosos, pero en realidad quitan libertad, limitan oportunidades y perjudican más a quienes tienen menos recursos.
Por Qué Importa la Libertad de Elección
En el núcleo de estos desafíos está un principio sencillo: la libertad de elegir. Los latinos valoramos profundamente la libertad de tomar decisiones que reflejen nuestras necesidades, nuestra cultura y nuestro estilo de vida.
La diversidad de California es una de sus mayores ventajas, y las políticas energéticas deben reflejar esa diversidad ofreciendo a las comunidades opciones que se ajusten a sus necesidades. Cómo viajamos o qué tipo de energía usamos en el hogar y en nuestros negocios debería ser una elección con más alternativas, no una cara imposición para todos.
Las familias saben administrar su dinero. Los pequeños negocios saben lo que necesitan para avanzar. Y las tradiciones, desde convivios familiares hasta fiestas comunitarias, no deberían depender de mandatos.
Un Mejor Camino Hacia Adelante
La comunidad latina en California está lista para un futuro más limpio y sustentable. Pero ese futuro tiene que funcionar para todos: desde los trabajadores del campo en el Valle Central, hasta los pequeños negocios en Los Ángeles y las familias trabajadoras en San Diego.
Si tu familia batalla con recibos cada vez más altos o si tu negocio se siente ahogado por regulaciones costosas, llegó el momento de hacer oír tu voz. Nuestro futuro no lo deben decidir mandatos restrictivos desde Sacramento, sino las decisiones y las voces de quienes hacemos de California nuestro hogar.
Únete. Juntos exijamos políticas que respeten nuestra cultura, cuiden nuestra libertad y apoyen nuestro futuro. Construyamos un futuro energético que funcione para todos en California. Porque cuando las familias y los negocios pueden decidir lo que más les conviene, todos salimos ganando.